Masturbación consciente: una guía paso a paso
Desde la primera vez que me masturbé, para mí el acto de masturbarme siempre fue algo mucho más significativo que un simple ejercicio para sacarme las ganas. Siempre lo vi como un momento especial, un mimo para el alma, un reencuentro conmigo misma. Y también como una forma de relajación y meditación. A esta forma de masturbarse la llaman “masturbación consciente”, porque nos ayuda a estar plenamente conscientes de nosotros mismos, de nuestro cuerpo, del momento presente.
Ahora te voy a contar mis secretos para que puedas disfrutar de la masturbación consciente tal como yo lo hago. ¿Querés que lo hagamos juntos?
Preparándonos para la masturbación consciente
Te voy a ir contando cada uno de mis movimientos para que nos masturbemos al mismo tiempo. No importa que seas hombre o mujer. Obviamente que si sos hombre no vas a poder hacer exactamente lo mismo que hago yo, pero igual podés acompañarme, haciéndolo a tu modo y con ritmo lento, para que vayamos a la par.
Hacete a la idea de que vas a estar un rato, así que reservate al menos el tiempo que puede durar esta lectura para masturbarte conmigo.
No vas a necesitar ver ni videos, ni fotos, ni ninguna clase de pornografía para excitarte. Sólo seguir mis instrucciones.
Te sugiero leer también: Slow sex, el arte de gozar con lentitud.
Buscando un lugar para masturbarte en privado
Encerrate en tu habitación o en el baño, y si hay otras personas en tu casa, asegurate de que nadie te moleste por un rato. Y, en lo posible, que nadie te escuche. También vas a necesitar un espejo. Si es uno donde puedas verte de cuerpo entero, mucho mejor.
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