
Fantasías de una hot-wife
Muchos maridos piensan (o saben) que sus esposas son ardientes. Se sienten orgullosos de tener esposas ardientes e incluso pueden llegar a disfrutar sabiendo que otros hombres las observan y las desean. Pero por más ardientes que sean, sus esposas no necesariamente merecen el mote de “hot wife”. Para merecerlo hay que cumplir algunos requisitos. Sigue leyendo para aprender todo sobre cómo ser una hot wife y para leer un relato de la genia de Vicky sobre su fantasía de hotwifing.
Una hot-wife es una esposa – o puede ser una novia, pero en una pareja estable – a la que su marido o novio le da permiso de tener relaciones sexuales con otros hombres. El marido, en cambio, se mantiene completamente fiel a su esposa. Él no tiene sexo con ninguna otra mujer, pero disfruta viendo cómo su mujer goza con otros hombres, y cómo otros hombres gozan con ella.
Esa simple definición de hot-wife (o esposa caliente, o esposa ardiente) nos despierta un montón de dudas, por lo que comenzaremos respondiendo a las preguntas más comunes entre los desconocedores del tema.
Tabla de contenidos
¿Qué es hotwifing?
El término “hot-wife” dio origen al verbo “hotwifing”, que básicamente hace referencia a la práctica erótica de permitir a una esposa tener relaciones sexuales con otros hombres – además de su propio esposo.
La práctica del hotwifing ha ido ganando popularidad en los últimos tiempos entre las parejas abiertas que consideran que la monogamia es anacrónica y que no tiene ningún beneficio. Pero no todas las relaciones abiertas implican que la mujer sea una hot-wife; en los próximos párrafos explico las diferencias entre el hotwifing y cada una de las distintas clases de relaciones abiertas.
¿Hay una versión masculina de hot-wife? ¿Existe el concepto de “hot-husband”?
No es habitual, pero existe. He sabido de mujeres que “entregan” a sus maridos a sus amigas para alardear de lo buenos que son en la cama. Sin embargo, es difícil imaginar a una mujer en el rol de cuck, o de “cornuda”, de un hot-husband. Tendría que ser una mujer deseosa de tratar a su marido como un objeto preciado, como si fuera una cartera o un vestido costoso. Ocurre a veces, pero no es habitual.
Pienso que cualquier mujer que presencie el acto sexual entre su marido y otra mujer, querrá como mínimo participar en el acto y convertirlo en un trío. Y, muy probablemente, querrá quitar de en medio a la otra mujer y demostrar que ella es la única que atiende a su marido como se lo merece. Yo lo haría.
Diferencias entre hot-wifing y cuckolding
Hay varios aspectos en común entre los conceptos de hot-wife y cuckold. En ambas situaciones, un miembro de una pareja permite que el otro miembro tenga relaciones con otras personas. En ambos casos, el miembro que acepta que su pareja intime con otros se mantiene afuera de la acción, pero observando, o por lo menos teniendo alguna retroalimentación de lo que su pareja hace con un tercero. Podría ser simplemente escuchando, o espiando a través de una rendija.

La diferencia entre hotwifing y cuckolding está en que en el cuckolding suele haber componentes de sumisión o de humillación. En el cuckolding, el “cornudo” no tiene el control de la situación. Simplemente permite que su pareja haga lo que quiera con un tercero (y/o que el tercero haga lo que quiera con ella), sin poder opinar ni decidir. Pero en el hotwifing, el cornudo suele ser el que toma la iniciativa.
El cornudo (que también en el léxico hot-wife se conoce como “cuck” o más bién “stag”) es el que decide “entregar” a su pareja a un tercero, pero manteniendo el dominio de la situación. El cuck puede participar como espectador o incluso como “director de orquesta” durante el encuentro de su hot-wife con un bull (o “corneador”; ver el pequeño léxico más abajo).
El marido de la hot-wife entrega a su propia esposa a un tercero como si fuera su dueño. Y como si ella fuera un objeto o un trofeo. Mientras tanto, él observa cómodamente mientras a ella le da placer otro hombre. En cierta forma, la diferencia entre hotwifing y cuckolding está en quién da las órdenes y quién obedece. En el hotwifing, el que da las órdenes es el cornudo y quien obedece es su pareja. En cuckolding suele ser al revés.
Diferencias entre hotwifing y poliamor
Es sencillo: en la práctica del hotwifing no debe haber sentimientos involucrados. El tercero que se invita a participar en los juegos sexuales – llamado “bull” tal como se explica en el léxico más abajo – debe ser un “juguete” para la pareja principal. Los únicos sentimientos admitidos son los que se tienen los miembros de la pareja principal.
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En el poliamor, en cambio, existen conexiones emocionales entre todas las personas involucradas en la relación, sin importar cuántas sean y sin importar el tipo de relación poliamorosa que mantengan. A diferencia del hotwifing o el cuckolding, en el poliamor se toman muy en serio las emociones entre las personas. El poliamor no es un simple juego sexual y todos los miembros involucrados son igualmente importantes.
Léxico hot-wife
Para entender sobre hotwifing se deben conocer algunos términos propios de esta actividad. Veamos…
Bull: Es el tercero, el invitado a tener sexo con la esposa del cornudo. El bull debe mantener y aceptar su condición de externo a la pareja. No tiene que tener sentimientos por ninguno de los miembros de la pareja y debe acatar las decisiones de éstos en cuanto a cómo llevar adelante las interacciones sexuales. Debe tener bien claro que, en su relación con la hot-wife, él no es más que un juguete, un consolador viviente, un “pedazo de carne”, por decirlo de alguna manera.
El bull no debe esperar o pretender que en su interacción con la hot-wife haya muestras de afecto o de cariño. Es conveniente que sea un profesional, para evitar riesgos de que surjan sentimientos, envidias o celos. Que tenga su tarifa, que cobre por su trabajo y lo haga, dejando satisfecha a la señora.
Cuck / Cuckold: Al cornudo – el marido de la hot-wife – comúnmente se lo conoce como cuck o como cuckold. En general, el término hace referencia al hombre casado con una mujer adúltera. Pero el cuck no es un cornudo cualquiera; es alguien con un fetiche por ser cornudo, que disfruta serlo, ya sea porque disfruta de la humillación de que le pongan los cuernos o porque se siente dueño de su pareja y decide deliberadamente entregarla a otros para que la disfruten tanto como lo hace él.
En muchos casos, el cuck es también un voyeur, porque disfruta viendo cómo a su esposa le dan placer otros hombres, sin que lo vean a él. En el relato “El espejo falso” puede verse un ejemplo típico de esta situación, en donde el marido se ve obligado a ver, a través de un espejo falso, cómo su esposa tiene sexo con un amigo.
Vixen: Es la hot-wife propiamente dicha. Pero cuando se la llama vixen, se da a entender que es una hot-wife muy “hot”; es decir, con mucha actitud, y que no es para nada sumisa. De hecho, la traducción de vixen al español es “zorra”. La vixen es sexy y seductora, y usa sus atractivos para atraer al bull. Entre la vixen y el stag (ver más abajo) puede llegar a existir un juego de poder, en el que ambos buscan tener el control de las situaciones eróticas que se dan entre ellos y otras personas.
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Stag: Es el marido de la hot-wife. Pero ojo, no es lo mismo que el cuck. El stag no es sumiso y no se deja humillar. Es él quien decide entregar a su esposa a otro(s) hombre(s). Es el “alfa” en la relación, teniendo derecho de decidir cuándo, cómo y con quién puede tener relaciones su esposa.
La fantasía de ser una hot-wife
Vicky nos cuenta su fantasía de ser una hot-wife sumisa, detallando cómo se imagina la situación en la que su marido trae a casa a un amigo y le pide a ella que tenga sexo con él. Es un relato bastante explícito, es por eso que sólo está disponible para suscriptores (la suscripción es gratuita; sólo sigan los links y completen sus datos, y ante cualquier duda, me dejan un comentario y yo los ayudo).
Me encantaría que me cuenten anécdotas de hot-wifing, principalmente por que yo no tengo experiencias de primera mano en esta “disciplina” y me gustaría leer historias de quienes sí las hayan tenido. Usen el recuadro de comentarios al pie de esta página y cuéntenme cualquier experiencia de hot-wifing que hayan tenido o que quisieran tener. ¡Los leo!
