Aromas del deseo
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Los aromas del deseo

Cuando sentimos una atracción inexplicable por una persona, deberíamos hacer la prueba de acercarnos a ella cubriéndonos la nariz, o durante un fuerte resfrío. Si la atracción desaparece, significa que su causa era el aroma del deseo, haciendo efecto directamente en nuestro cerebro.

¿Qué nos sucede realmente cuando nos apremia la necesidad de oler a nuestra pareja? ¿Por qué nos gusta tanto esa proximidad en la que caen las barreras y nos llenamos de ese contacto tan básico como el olor de su cuello, de su pecho o incluso el de su íntima excitación? ¿Qué nos influye a ese nivel y por qué aumenta nuestra sed y deseo?

Trataremos de comprender lo que nos sucede en realidad y las reacciones que se producen en nosotros cuando nuestro cuerpo percibe los aromas del deseo.

La relevancia del olfato

Aparte del empeño que podamos poner en seducir a otra persona para establecer una relación, hay una parte científica sólida sobre el papel que juega la parte olfativa en las relaciones. Aunque no seamos conscientes de ello, cuando nos atrae una pareja para tener relaciones, hay un efecto químico detrás que se produce cuando inhalamos los aromas naturales que se desprenden de él o ella, y que van cargados de sus feromonas.

Un simple aroma, como un hechicero poderoso, nos permite evocar un momento, un recuerdo.
Un simple aroma, como un hechicero poderoso, nos permite evocar un momento, un recuerdo.

El olfato, contrariamente a lo que pensamos, es nuestro sentido más importante, junto al sentido del oído. Un simple aroma, como un hechicero poderoso, nos permite evocar un momento, un recuerdo. El olfato tiene un papel trascendental en las relaciones. Los flechazos se producen frecuentemente por causa de estímulos olfativos, derribando el mito del amor a primera vista. 

¿Cómo se siente el aroma del amor?

Somos mamíferos, y esto ya nos viene de lejos como especie. De forma natural e inconsciente, producimos estas sustancias químicas a través de glándulas (glándulas apocrinas) que tenemos ubicadas en nuestros órganos reproductores, en las axilas, en nuestra saliva, lágrimas, en el semen y flujo vaginal. Tenemos órganos olfativos (órgano vomeronasal, también llamado órgano de Jacobson) que son capaces de detectar las feromonas y enviar las señales oportunas al cerebro.

Órgano vomeronasal
Órgano vomeronasal

En los animales existe una conexión nerviosa directa entre el cerebro y las fosas vomeronasales. En los humanos no, pero se ha demostrado que existe un vínculo y que es relevante en las tendencias sexuales. Estas glándulas son capaces de discriminar la herencia genética, siendo propias de cada especie. De alguna forma son capaces de detectar qué pareja puede favorecer más a la supervivencia del individuo, procurando que haya mayor diferencia genética para que el fruto de la relación dé lugar a una herencia más fuerte, que combine ambas capacidades y garantice la fortaleza y continuidad de la especie.

Las feromonas y la supervivencia de la especie

Hay experimentos que demuestran la teoría de que las feromonas aseguran la supervivencia de la especie, como el experimento de “las camisas sudadas” realizado en la Universidad de Berna (Suiza) por el zoólogo Claus Wedekind. En ese experimento, 44 hombres llevaron de forma anónima la camiseta de algodón durante dos noches, sin tomar bebidas ni especias raras, y evitando sustancias extrañas como colonias, alcohol, etc.

Luego de encerrar estas camisas en cajas perforadas, se les pidió a 49 mujeres que seleccionaran y clasificaran las camisas según la intensidad, placer o sensualidad que sentían mientras olfateaban las cajas. El experimento demostró que las mujeres en su mayoría preferían las camisetas de hombres que mostraban mayor diferencia de compatibilidad en los genes respecto a la suya, circunstancia que probaba que buscaban de forma inconsciente una descendencia que tuviera la mayor ventaja de supervivencia posible. Dicho de otra forma, las mujeres seleccionan a su pareja utilizando el olfato para detectar su trasfondo genético.

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La alimentación, las costumbres, e incluso los fármacos, los anticonceptivos hormonales, influyen directamente  en el aroma que desprende la piel.
La alimentación, las costumbres, e incluso los fármacos, como los anticonceptivos hormonales, influyen directamente  en el aroma que desprende la piel.

¿Qué pasa con la higiene? ¿Debemos dejar de lavarnos para enamorar ?

No, en absoluto. Esto no significa que tengamos que ir por ahí sin lavarnos, de hecho hay que tener una buena higiene, pues la piel es el órgano más extenso que tenemos. Hay que cuidarla bien y lavarla, pues las bacterias que tenemos en la parte superior de la misma retienen los olores y sin la limpieza adecuada pueden llegar a ser terribles y molestos.

Hoy en día, los perfumes que utilizamos enmascaran los olores naturales, que juegan un papel tan importante en la química que se genera en la relaciones y que puede llevar o no a una relación, apareciendo una compatibilidad sexual. Un estudio de la universidad de Bremen (Alemania) con mujeres y hombres entre los 15 y 84 años, demostró que el aroma que se consideraba más “agradable” y sexualmente atractivo era el corporal, sin disfraces, pasando por el aroma de las axilas y del pecho.

Hay que tener en cuenta también que la alimentación (especias, ajos…), las costumbres, e incluso fármacos tales como los anticonceptivos hormonales, influyen directamente en el aroma que desprende la piel, la sudoración y por ende las feromonas. Por ejemplo, lo que para unas etnias puede ser atrayente, para otras puede ser repelente. Aunque esto mismo sucede en individuos de la misma especie, no todos percibimos los olores del mismo modo.

¿Tenemos todos la misma capacidad de detectar estas feromonas?

No todos las detectamos de igual forma, ni nos influyen del mismo modo. Se ha demostrado en algunos estudios que existe una relación directa en la forma de percibir los olores y la sensibilidad olfativa, con el deseo sexual. Esto está relacionado también con la cultura. A mayor importancia en la sensibilidad olfativa, mayor es el deseo sexual. 

Las feromonas que desprende el sexo femenino (estradiol) tienen composición diferente a las que generan los hombres (progesterona). Esto tiene su lógica, teniendo en cuenta que su función es lograr una atracción entre los distintos sexos.

Se supone que generamos feromonas cuando nos acercamos a la persona que nos atrae, y esto se podría definir como “olor a sexo”. Nos indica de forma invisible si esa persona está disponible, si es buena para la relación, o si simplemente no nos atrae. Desde luego, esto estará relacionado con el aseo personal.

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Las feremonoas que desprende el sexo femenino (estradiol) tienen composición diferente a las que generan los hombres (progesterona).
Las feromonas que desprende el sexo femenino (estradiol) tienen composición diferente a las que generan los hombres (progesterona).

También hay estudios que demuestran que las personas con mayor capacidad olfativa tienen mejores y más plenas relaciones sexuales.

Las mujeres, por ejemplo, tienen mayor capacidad olfativa que los hombres, pero tienen por lo general el deseo sexual menos desarrollado que el hombre. Son capaces de detectar sus propias feromonas. Por su parte, los hombres con mayor capacidad olfativa son los más propensos a tener relaciones y los que tienen mayor deseo sexual.

Feromonas que enamoran

Ahora bien, ¿Son las feromonas tan potentes como nos gustaría creer? Lo son. Pero, en condiciones normales, no las producimos en cantidades suficientes como para que sean tan efectivas como nos gustaría. Nos duchamos, utilizamos desodorantes, perfumes, y todo eso altera nuestra química corporal. Por ello, muchas veces obstruimos las glándulas que emiten las feromonas. Además, no todos segregamos las mismas cantidades de feromonas. Es por eso que hay personas que, sin ser especialmente agraciadas, logran tener un mayor atractivo sexual que otras mucho más atractivas a la vista.

¿Se pueden utilizar feromonas sintéticas? Pues sí, existen las feromonas de bote, y hay algunas bastante conocidas y experimentadas. Existen más de 50 tipos distintos de feromonas humanas, pero las que más se sintetizan son las 3 que veremos a continuación.

Principales feromonas sintéticas

La Androsterona, producida por las glándulas sudoríparas de las axilas, atrae a las mujeres y repele a los hombres. Se ha experimentado con ello en perfumes, logrando buenos resultados.

El Androstenol es producido por las glándulas sudoríparas. Se asocia a la fertilidad femenina. Su uso afecta de forma positiva a la percepción e impresiones que una persona puede sentir de otra. Se ha experimentado y se utiliza en reuniones de negocios.

La Copulina es un compuesto de ácidos grasos que se encuentran en las secreciones vaginales de la mujer adulta y que tiene un efecto relajante sobre el varón. Son secretadas durante los días fértiles de la mujer (antes de su ovulación) produciendo la señal de atracción hacia los varones. El uso de anticonceptivos disminuye su producción y con la menopausia, esta deja de producirse.

¿Nos afectan siempre igual y del mismo modo?

La conclusión de todo esto es que las feromonas no huelen directamente, sino que se perciben al nivel del subconsciente. Su influencia depende del momento, del lugar y de la predisposición. Es por eso que, en algún momento, un aroma nos pueda parecer excitante, mientras que en otro momento nos puede resultar todo lo contrario.

Pero, teniendo en cuenta todo explicado, con la emisión de feromonas con los sexos opuestos, ¿no estamos dejando fuera su efecto y funcionamiento en las parejas homosexuales? Hay poco escrito al respecto, si bien hay algo sobre una feromona presente en el sudor masculino: un derivado de la testosterona llamado AND que es capaz de atraer tanto a mujeres como a hombres homosexuales. Su equivalente en las mujeres se halla en su orina y es el EST, pero este sólo atrae a los varones heterosexuales, y no a los homosexuales ni a las mujeres. En el caso de la atracción de las parejas femeninas, su cerebro reacciona a las feromonas del mismo modo que lo hace el de los varones heterosexuales.

¿Qué opinas sobre la influencia de los olores en la atracción sexual? Cuéntame tus experiencias en la sección de comentarios.

Fuentes

El poder del olfato en la atracción sexual

Estudio de la universidad de WanTong

Articulo de la revista GQ

Influencia del olor en la selección de pareja (experimento camisetas sudadas)

Las feromonas que excitan a mujeres y hombres por igual

¿Las feromonas son lo que atrae realmente al sexo opuesto?

Sociología del olor

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