Categories: RelatosSensaciones

“Sin mirar”, relato de mi primera experiencia lésbica

Ella se llama Antonella. Era mi vecina. Con ella aprendí cómo una mujer puede darle a otra mujer una clase de placer diferente de la que cualquier hombre puede llegar a dar. Hace algunos años tuve una vecina que era prostituta. Y además era ciega. Sí, una combinación rara. Pero,

Para continuar leyendo, necesitás estar suscripto a este blog. Si tenés un usuario y contraseña, ingresalos para poder acceder al resto del contenido. Si no, registrate completando los campos de abajo (¡ES GRATIS!).

Fátima Medina

Fotógrafa, escritora, podcaster, madre, ingenua, soñadora, idealista...

Recent Posts

El sucio encanto de la salirofilia

La salirofilia es un fetichismo que consiste en obtener placer sexual denigrando, ensuciando o tratando…

1 hora ago

Todo lo que hay que saber sobre cruising

Se conoce como cruising a la búsqueda de encuentros sexuales casuales en espacios públicos -…

6 días ago

Fantasías de una hot-wife

Una hot-wife es una mujer a quien su pareja le da permiso de tener relaciones…

4 semanas ago

La ropa sucia de los miércoles (relato erótico)

Un relato erótico que trata sobre los estímulos olfativos y sobre cómo éstos pueden desatar…

1 mes ago

Cómo ser una hot-wife sumisa

Me puse a fantasear con la posibilidad de ser una hot-wife del tipo sumisa. Y…

1 mes ago

Alimentando a las fieras (parte I)

Un relato que surge a partir de un video triple-X. Una fantasía que mezcla múltiples…

2 meses ago